¿Qué hace a un gran escritor?

Desde hace siglos, los escritores han logrado sembrar una huella profunda en el mundo. Todas las sociedades y épocas tienen en sus escritores o los de épocas pasadas, buena parte de las raíces de su cultura, sus instituciones, su idiosincrasia y esa esencia que representa a cada pueblo.

En la historia, tenemos a grandes escritores como referentes de cambios sociales, tanto impulsando como reseñando dichos cambios. Grandes genios que quedaron grabados en la memoria colectiva y sirvieron de motor e inspiración para cambios que llevaron a la conformación del mundo y los procesos sociales que hoy conocemos.

A todo esto, cabe preguntarse ¿Qué hace a un gran escritor? ¿Se trata solo de ser original o tener un gancho que permita vender muchas copias de un libro? ¿O hay mucho más en ese sitial de honor donde pocos en la historia figuran como grandes escritores de la humanidad?

Veamos algunos consejos que consideramos necesario cumplir para ser un gran escritor.

Escribir con un sentido

Todo gran escritor persigue un fin al escribir, hay algo que desea transmitir, puede ser un asunto interno que necesita sacar y compartir con el mundo, o puede ser un tema de reflexión con miras a mejorar el mundo, pero nunca se trata sólo de juntar letras y ver como salen las cosas, sin un fin, sin una meta al escribir, es difícil llegar a ser grande como escritor.

Reducir o sintetizar es más importante que sumar hojas y hojas

Es algo clave, que los grandes escritores consideran como elemento determinante: Todo buen escritor usa la menor cantidad de palabras para expresar lo que necesita en el papel. Si con 100 páginas puedes narrar una historia, plasmando las emociones y todo lo que requieres, usar 300 no te hará mejor escritor, por el contrario, el gran escritor revisa, tacha y resume siempre sus historias.

No te obligues a ser genial

Pocas cosas son más desagradables que una persona que se esfuerza de manera desesperada en parecer genial, esa necesidad perentoria de sobresalir con su genio, lleva a historias forzadas en intentos de complejidad, profundizar en temas que pueden explicarse con sencillos textos, el forzar la genialidad tiene exactamente el resultado contrario: La persona termina luciendo como alguien mediocre desesperado o desesperada por resaltar.

Dale un toque personal a tu historia

Siempre recordando el consejo anterior (no obligarte a ser genial), es importante que hagas algo distinto a recopilar una historia y contarla, ese es el trabajo de cronistas e historiadores, el buen escritor tiene que darle un toque personal, y solo se puede ser un gran escritor si se logra combinar ese toque personal con aquello que la sociedad y / o tus lectores demandan o necesitan en ese momento.

Es muy importante ser fiel al tipo de escritura que te gusta o la que te inspira.

Evita las fórmulas mecánicas para hacer una buena historia

Cualquier fórmula que se venda como un enlatado para hacer una gran historia es falsa, un gran escritor sabe que tiene que buscar su propio camino, sin duda basándose en herramientas o elementos que ya han usado otros antes, pero siempre evita las fórmulas mecánicas que aseguran que al usar cierto número y selección de ingredientes, como por arte de magia dará como resultado una buena historia.

Si existiera tal cosa como un “disuelva, mezcle y ya”, para hacer un gran libro, los grandes escritores abundan abarrotando los caminos, pero las fórmulas mágicas no existen, hay que leer a los grandes, formarse y trabajar duro.

Por último, pero muy importante, es determinante tener el valor de mostrar al mundo tu visión o manera de ver las cosas, la timidez nunca acompaña a un gran escritor.